Meyer intentaba explicar las emociones que surgen de la música en función de lo que el oyente espera que suceda y lo compara con lo que sucede en realidad. Estas expectativas estaban determinadas por 2 elementos:
-1º Una serie de normas mediante las cuales un oyente competente interpreta lo que oye (como saber un idioma).
-2º Los modelos que crea la música cuando se interpreta siguiendo tales normas (algo que comienza y termina en tónica es cerrado y el oyente no espera nada más y si no concluye en tónica si espera algo más).
Por ello Meyer pensó que un método de análisis basado en principios psicológicos generales que comprenden elementos como la apertura o clausura, sería aplicable a cualquier tipo de música. Es necesario comprender las normas generales, sólo cuando sepamos las normas estilísticas seremos capaces de explicar la satisfacción emocional que nos causa una pieza musical desde el punto de vista de su estructura técnica.
Esto tiene dos características:
A) En lugar de tratar el contenido emocional en su totalidad Meyer se limita a la experiencia de unidad y coherencia en música.
B) Meyer se circunscribe básicamente al análisis de música tonal.
Conceptos
Meyer denomina "un movimiento para rellenar un vacío" basándose en que un intervalo disjunto es como un "vacío, implicando que la nota que se ha saltado será tocada a continuación.
"Evento generativo" es lo que llama Meyer a una secuencia, la cual conlleva obligatoriamente una resolución. Por ejemplo: el giro La- Mib- Re, continuaría Do- Sib. ¿Por qué? Porque el Sib es la tónica y por normas estilísticas es el punto de llegada lógico (o psicológico) del modelo.
Otro patrón marcado por Meyer es el retraso del movimiento de respuesta esperado. Esto comprende la altura y los modelos rítmicos. Meyer ve una contradicción entre lo que implican las alturas y los ritmos en determinados casos. El resultado de la discrepancia es el "vacío".
Ritmo
En el análisis de Meyer es importante el Ritmo y el estudio del Ritmo es complementario al de las alturas.
Los ritmos se perciben como modelos cuyas unidades básicas consisten en un tiempo fuerte y 1 ó 2 tiempos débiles asociados a él. Las formas de asociación dan lugar a 5 tipos de grupos rítmicos extraídos de la poesía greco-latina, los cuales son la base de todo el análisis rítmico de Meyer.
YAMBO U -
ANAPESTO U U -
TROQUEO - U
DÁCTILO - U U
ANFÍBRACO U - U
Un grupo rítmico incompleto implica una continuación. Los grupos completos dan sensación de clausura.
En el Nivel 1 Meyer designa el nivel mínimo en el que la música es divisible en una serie continua de grupos rítmicos. Si hay que subdividir más se utilizarían letras minúsculas.
El sistema entero está basado en el grupo rítmico y el grupo rítmico a su vez se basa en la distinción entre tiempo fuerte y tiempo débil.
Para hacer un análisis rítmico lo primero es determinar tiempos fuertes y después establecer cómo se asocian los débiles a ellos. Lo que diferencia un tiempo débil de uno fuerte es un ACENTO. Éste tiene significado psicológico ya que no se puede definir en función de sus causas.
Cuando Meyer analiza el ritmo se vale de la acentuación rítmica como un medio de establecer y anotar su reacción a la música en conjunto.
En el 2º Nivel cada uno de los grupos debe empezar y concluir coincidiendo con alguno de los grupos del primer nivel y no a mitad de ellos.
Los criterios utilizados para determinar los acentos y las agrupaciones son los mismos en todos los niveles.
Según la psicología de la Gestalt la mente interpreta las cosas de la manera más sencilla posible.
Comparación con el sistema de análisis schenkeriano.
Los dos sistemas intentan averiguar cómo es la estructura en casos concretos. Los dos modelos llegan a las mismas conclusiones.
El intento de poner por escrito nuestras reacciones ante la música por medio de los símbolos de Meyer implica plantearse constantemente dónde se siente que ha de estar un tiempo fuerte y en relación con qué, lo cual es una ayuda excelente para esclarecer pasajes problemáticos.
El análisis rítmico es útil como sistema de observación en mayor detalle. Esto se debe a que la naturaleza de la acentuación cambia al pasar de un primer plano a un plano más profundo. Por lo tanto, el análisis rítmico es más eficaz en los primeros niveles y para los siguientes es más efectivo el schenkeriano. Para la música atonal es útil el sistema rítmico, sin embargo el schenkeriano no tiene cabida.
Los dos sistemas son complementarios. Una reducción schenkeriana esclarece la continuidad armónica de la música a gran escala pero omite los contrastes del primer plano
Las técnicas de Meyer son útiles a la hora de observar los rasgos superficiales, especialmente los contrastes rítmicos.
El objetivo de cualquier análisis es avanzar más allá de lo obvio para llegar a lo que no lo es, y en esto Schenker ofrece más ventajas, puesto que en la mayoría de los casos lo obvio son las irregularidades y no lo son en cambio, las razones por las que la música no pierde su coherencia.
COOK, NICHOLAS. El análisis desde la perspectiva psicológica de Leonard Meyer, University of Chicago Press, 1956.
1 comentario:
I've studied these analysis theories at the University. Mayer's (with his co-author Grosvenor Cooper) and Carl Sachser... but I'm not particularly a fan of these systems although, in certain contexts, Cooper and Meyer's seem very handy.
Best wishes,
Luís Henriques
Publicar un comentario